El día 21 de julio, junto a dos buddys de buceo, Marco Baeza y Stanley Franz, pude efectuar un espectacular buceo en el viejo Blindado Blanco Encalada, que descansa en la bahía de Caldera desde el año 1891. Esta ciudad se encuentra en el norte de Chile, y es la entrada al desierto, pero paradojalmente el día que llegamos estaba lloviendo, hacía 12 años en que no llovía, por lo cual vimos que el buceo sería distinto, pero al apreciar el agua nos dimos cuenta que está estaba muy transparente. Por lo cual decidimos comenzar el buceo a la brevedad, considerando que tendríamos una profundidad máxima de 17 metros y una temperatura de 14º celcius en el agua.
Una vez fondeamos la línea guía con el muerto (peso o lastre), iniciamos el descenso, y para sorpresa nuestra, al estar a 9 metros de profundidad pudimos apreciar en su totalidad los restos del naufragio, lo cual fue un espectáculo maravilloso para nuestras vistas, eso sí
considerando que este viejo buque fue dinamitado hace muchos años atras para construir un muelle, el cual a la larga solo funcionaría unos pocos años, y que hoy no es más que una pila de desechos. Es así que iniciamos el recorrido del blindado, apreciando los restos de su casco, el espesor de este, y viendo los pocos elementos de la máquina que aún quedan bajo agua. destacando que aún es factible apreciar restos de madera de lo que fueron
probablemente pañoles de carga.
En base a esto repetimos el buceo en la tarde, siendo una excelente oportunidad de poder continuar recorriendo este naufragio.
Será hasta la próxima, saludos Daniel
