La posibilidad de sumergirse en el mar al ser humano, le permite poder explorar un nuevo mundo. El cual en condiciones normales se le encuentra vetado, producto de ser un medio de una densidad completamente distinta a la del aire, y de que el agua no nos da el combustible más importante para vivir, el oxígeno. Por esto cuando uno desea ingresar a este nuevo mundo, se enfrenta a condiciones físicas, fisiológicas y psicológicas adversas. De estas condiciones, muchas son de una relativa fácil solución, producto del avance tecnológico y la confección de equipamiento adecuado en las últimas décadas. Pero hay una, que depende casi totalmente del buzo, esta es el factor psicológico. Este factor es uno de los más difíciles de superar, pues el ser humano se encuentra adaptado a un ambiente sólido. Como dicen los buzos e incluso los paracaidistas “todo cambia cuando tu cuerpo no tiene donde afirmarse”, es por esto y por lo “desconocido” en que muchos posibles buceadores, no se atreven a descubrir este nuevo mundo. Como a su vez las historias, televisión y el cine, han promovido una serie de monstruos terribles bajo el mar, por lo cual muchos preguntan a los buzos si uno ha visto un ser parecido a tal cosa.
Pero bueno, ya nos podemos dar cuenta de que al ingresar al mar, lago o río, nos adentramos a un mundo nuevo, el cual tiene una serie de maravillas que mostrarnos, pero para poder realizar esto, debemos tener un equipamiento adecuado y condiciones personales, y de esto último comentaremos a continuación.
Al adentrarnos en las condiciones personales, encontramos muchas características, como son la responsabilidad, orden, criterio, auto control, etcétera. Pero por ahora solo veremos el auto control, característica muy importante en un buzo y obligatoria en un buzo técnico o profesional.
Primero describiremos el auto control, como la capacidad de un buzo de “pensar antes de actuar”, pues el razonamiento nos permite efectuar determinadas acciones con lógica. Esto nos lleva, a que ante un problema, podamos reaccionar o actuar de la manera más correcta. Esto en el papel suena muy fácil, pero en la realidad requiere de un gran entrenamiento, pues lo primero que debemos hacer, es lograr que el buzo se sienta extremadamente cómodo en el agua. Lo segundo es que este se conozca a si mismo, como por ejemplo tenga claro el tiempo que puede estar sin respirar, con esto se dará cuenta que dispone de mucho tiempo para actuar en condiciones adversas. Lo tercero es el conocimiento, pues “quien sabe puede actuar correctamente”, es así que al estar a una profundidad de 30 metros y ver a su compañero realizando acciones ilógicas podrá determinar que tiene y que debe hacer. Lo cuarto es el entrenamiento, como dice un muy viejo proverbio militar, “mientras más sudes en la paz menos sangraras en la guerra”, esto va directamente relacionado, con las acciones que uno ejecuta, pues sentirá confianza al efectuarlas, como a su vez le saldrán en forma automática, ante diferentes situaciones. Por último, la quinta característica para fortalecer el auto control es la experiencia, es así que para ser un buen buzo se debe bucear en forma constante y gradual, esto último es como cuando un montañista asciende una cumbre, primero debe saber que es un loma, después un cerro y finalmente una montaña. En el buceo, es lo mismo, inicialmente debo aprender a ser un buzo Open Water, posteriormente un Advanced, luego un Deep Diver y así en forma gradual y lógica ir ascendiendo, en la escala del conocimiento y capacidades.
Practicar y enseñar el auto control, es un tarea que requiere principalmente paciencia, pues se debe ser repetitivo, se debe dar confianza a quien se tiene al frente, se debe volver a lo básico, objeto repasar esas cosas que uno ha dejado en el olvido, como normalmente es nadar, efectuar apnea, jugar en el agua, y otras innumerables actividades. A su vez, se deben realizar actividades que exijan al máximo al buzo objeto prepararlo para lo peor. Y se debe recordar que todas las personas son distintas, por lo cual el avance de cada una será por lo general diferente, es así que cada uno requerirá distinta atención, y probablemente una forma de actuar diferente.Finalmente podemos ver que el auto control, es una condición esencial en un buzo, la cual con un correcto manejo de enseñanza es alcanzable en un tiempo razonable por este, y a su vez será distinta la forma de alcanzarlo entre los diferentes buzos.
Bueno, buzos y posibles buzos, es hora de continuar aprendiendo, entrenando y buceando, para que así conozcamos en forma segura las maravillas que nos esconde el fondo del mar.
Pero bueno, ya nos podemos dar cuenta de que al ingresar al mar, lago o río, nos adentramos a un mundo nuevo, el cual tiene una serie de maravillas que mostrarnos, pero para poder realizar esto, debemos tener un equipamiento adecuado y condiciones personales, y de esto último comentaremos a continuación.
Al adentrarnos en las condiciones personales, encontramos muchas características, como son la responsabilidad, orden, criterio, auto control, etcétera. Pero por ahora solo veremos el auto control, característica muy importante en un buzo y obligatoria en un buzo técnico o profesional.
Primero describiremos el auto control, como la capacidad de un buzo de “pensar antes de actuar”, pues el razonamiento nos permite efectuar determinadas acciones con lógica. Esto nos lleva, a que ante un problema, podamos reaccionar o actuar de la manera más correcta. Esto en el papel suena muy fácil, pero en la realidad requiere de un gran entrenamiento, pues lo primero que debemos hacer, es lograr que el buzo se sienta extremadamente cómodo en el agua. Lo segundo es que este se conozca a si mismo, como por ejemplo tenga claro el tiempo que puede estar sin respirar, con esto se dará cuenta que dispone de mucho tiempo para actuar en condiciones adversas. Lo tercero es el conocimiento, pues “quien sabe puede actuar correctamente”, es así que al estar a una profundidad de 30 metros y ver a su compañero realizando acciones ilógicas podrá determinar que tiene y que debe hacer. Lo cuarto es el entrenamiento, como dice un muy viejo proverbio militar, “mientras más sudes en la paz menos sangraras en la guerra”, esto va directamente relacionado, con las acciones que uno ejecuta, pues sentirá confianza al efectuarlas, como a su vez le saldrán en forma automática, ante diferentes situaciones. Por último, la quinta característica para fortalecer el auto control es la experiencia, es así que para ser un buen buzo se debe bucear en forma constante y gradual, esto último es como cuando un montañista asciende una cumbre, primero debe saber que es un loma, después un cerro y finalmente una montaña. En el buceo, es lo mismo, inicialmente debo aprender a ser un buzo Open Water, posteriormente un Advanced, luego un Deep Diver y así en forma gradual y lógica ir ascendiendo, en la escala del conocimiento y capacidades.
Practicar y enseñar el auto control, es un tarea que requiere principalmente paciencia, pues se debe ser repetitivo, se debe dar confianza a quien se tiene al frente, se debe volver a lo básico, objeto repasar esas cosas que uno ha dejado en el olvido, como normalmente es nadar, efectuar apnea, jugar en el agua, y otras innumerables actividades. A su vez, se deben realizar actividades que exijan al máximo al buzo objeto prepararlo para lo peor. Y se debe recordar que todas las personas son distintas, por lo cual el avance de cada una será por lo general diferente, es así que cada uno requerirá distinta atención, y probablemente una forma de actuar diferente.Finalmente podemos ver que el auto control, es una condición esencial en un buzo, la cual con un correcto manejo de enseñanza es alcanzable en un tiempo razonable por este, y a su vez será distinta la forma de alcanzarlo entre los diferentes buzos.
Bueno, buzos y posibles buzos, es hora de continuar aprendiendo, entrenando y buceando, para que así conozcamos en forma segura las maravillas que nos esconde el fondo del mar.